Según la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2021) la desnutrición se define como la deficiencia o exceso en la ingesta de nutrientes.
La desnutrición es el resultado de una ingesta de alimentos que, de forma continuada, es insuficiente para satisfacer las necesidades de energía alimentaria. También es posible decir que la desnutrición comprende tanto el desequilibrio o la utilización deficiente de nutrientes. La desnutrición generalmente provoca pérdida drástica de peso corporal.
La UNICEF (2021), por otro lado, define la desnutrición como la ingesta de alimentos en relación a las necesidades dietéticas del organismo. Esto es tomando la desnutrición como resultado de: la ingesta insuficiente de alimentos (tomando en cuenta cantidad y calidad), la falta de una atención adecuada y la aparición de enfermedades infecciosas. La desnutrición se puede manifestar en la relación de los parámetros de edad-estatura-peso.
La desnutrición es una enfermedad multi-sistémica que afecta las funciones orgánicas y psíquicas de los individuos que la padecen. Este padecimiento también se asocia a cambios fisiológicos, bioquímicos e inmunitarios que favorecen la aparición de otras enfermedades (Suárez Sanabria & García Paz, 2017)
La desnutrición puede manifestarse en cuatro formas distintas, estas son:
Retraso en Crecimiento
Emaciación - Peso de la persona es inferior al que corresponde según la estatura
Insuficiencia Ponderal - Peso inferior a la medida esperada
Hambre - Carencia de Minerales y Vitaminas (desnutrición severa)
Algunos de los factores que pueden causar la desnutrición incluyen, pero no están limitados a:
Pobreza y desigualdad social -Acceso a servicios de salud -Acceso a agua potable
Alimentación por debajo de demandas nutricionales
Trastornos alimentarios o condiciones preexistentes
Otras
La desnutrición es aún en la actualidad una de las principales amenazas para la supervivencia, la salud, el crecimiento y el desarrollo de las capacidades de millones de personas en el mundo.
(OMS, 2021; Suárez Sanabria & García Paz, 2017; Sylva Lazo, et. al, 2020; UNICEF, 2021)